Un futuro más verde gracias a la implementación de flotas eléctricas.
un vehículo eléctrico
representa una excelente oportunidad para la mejora de la eficiencia energética. También para la reducción de la dependencia del petróleo en el sector del transporte, y para la mejora de la calidad del aire en las ciudades de todo el mundo.
En la actualidad, es prácticamente imposible que alguien no haya participado en una conversación sobre los vehículos eléctricos. Y más ahora que el tema del cuidado ambiental se ha vuelto de gran preocupación para todos. Si bien se ha tocado desde el punto de vista de un particular ¿cómo aplica para las empresas? ¿será conveniente para una organización actualizar o considerar una flota eléctrica?
UNA GRAN OPORTUNIDAD ANTE UN GRAN RETO
Las empresas hoy en día se enfrentan a retos de ahorro y sostenibilidad de sus flotas. Cobrando tendencia el modelo de la electromovilidad como alternativa viable en función de sustituir la gasolina o diésel en el transporte de carga.
Por ello, el uso de vehículos eléctricos cada vez está tomando mayor relevancia en México y en todo el mundo. Tanto para transporte particular como de carga como solución de la industria automotriz en función de reducir su impacto ambiental. En este sentido, además de beneficiar al medio ambiente, las empresas que deciden implementar flotas eléctricas en sus operaciones pueden anticiparse a las posibles regulaciones que podrían restringir en materia de movilidad.
Un claro ejemplo es Grupo Bimbo. Han añadido 100 vehículos eléctricos a su flota a los 400 que tiene para repartir sus productos, con el objetivo de reducir emisiones de CO2. Cada una de estas unidades eléctricas equivalen a la emisión de 5.1 toneladas de dióxido de carbono al año, lo que representa plantar 180 árboles.
Grandes ventajas para las empresas
Una flota eléctrica aporta innumerables ventajas para las empresas, tanto tangibles como intangibles:
Sostenibilidad: Los vehículos eléctricos reducen hasta un 60% de emisiones y contribuyen a mejorar la contaminación del aire. También son sostenibles con la contaminación acústica.
Autonomía: Cuenta con la autonomía suficiente para que sean una alternativa real para la mayoría de los conductores. Las últimas baterías ofrecen una autonomía de 270 km y el 95% de la distancia media diaria recorrida está por debajo de los 200 km.
Disponibilidad en el mercado: La disponibilidad de vehículos eléctricos se ha disparado, pudiendo encontrar en el mercado una opción válida para cada flota.
Menor Coste: El combustible representa aproximadamente un 30% del coste total de movilidad de una flota. Además, estos vehículos no llevan aceites ni lubricantes y los frenos no sufren el mismo desgaste que uno de combustión, en pocas palabras requieren de un menor mantenimiento.
Conductores más satisfechos: Le permite al conductor experimentar una aceleración más rápida, tranquilidad de estar conduciendo un automóvil que no contamina, el nivel de ruido del motor es mucho menor, por lo que el estrés es menor también.
Incorporación de las flotas eléctricas
Hasta hace algún tiempo, los vehículos eléctricos como carros y motos eran vistos como algo futurista o costoso. Sin embargo, esta visión ha cambiado.
Según una encuesta realizada a nivel global por la Alianza Renault-Nissan-Mitsubishi revela que dos tercios de los entrevistados piensa que 20 años su flotilla será completamente eléctrica. El sondeo aplicado a miles de propietarios de pequeñas empresas y tomadores de decisión reveló que aplicarían la tecnología de movilidad eléctrica como autónoma para mejorar el desempeño de sus flotas.
Las flotas eléctricas han llegado para quedarse, y a medida que el sector de transporte y logístico va acelerándose, en Resser seguimos desarrollando e implementando herramientas y soluciones innovadoras para beneficio de las empresas.
Escrito por: Ricardo Meneses